miércoles, 27 de agosto de 2014

Amor Eterno

Hace unos días, una persona cuestionaba la temática de muchas de las letras de las canciones que escribo, pues muchos hablan de desamor. Tomaba en cuenta varios eventos de mi propia historia personal en su planteamiento, la pregunta central fue, si después de todo, y tras un divorcio, yo había dejado de creer en la idea del amor total y eterno en una pareja.

Una pregunta justa, es un hecho. Pero la respuesta sigue siendo fácil, Creo en la idea, con total convencimiento de ello.

Me parece que el amor toma formas raras, pero al final, solo es; hoy leo en una nota de Julio Cortázar en los encabezados de Google: “Andábamos sin buscarnos, pero sabiendo que andábamos para encontrarnos”. Creo que el amor es así, es algo que no se busca, que simplemente aparece cuando menos te lo esperas, pero cuando lo encuentras sabes reconocerlo de inmediato. No se planea, no se puede forzar, solo es,  sin dudas ni preguntas. Es a donde vuelven tus pensamientos de forma constante. Empieza como una chispa divina y puede brillar con la fuerza de la más intensa luz. Pero es un hecho, debes alimentarlo, el amor se construye día con día, y generalmente cuando lo tienes, olvidas todo, incluso hacer eso. Lo que lleva inevitablemente al dolor de perderlo. Es por ello que hay mucho más voces hablando de desamor que de amor, porque aún no sabemos cuidarlo bien.

Cierto es, que la respuesta a mi argumento fue también muy razonable – OK, el amor existe, pero no es eterno, más bien parece ser absolutamente finito, he ahí el porqué de los divorcios -, me dijeron.

Hay quien dice que el amor es solo una ilusión temporal, que dura 6 meses, otros dicen que 3 años, otros tantos podrán poner cifras que desde su perspectiva consideren válidas. Yo pienso que puede ser eterno, pero mi perspectiva tiene varias aristas. Trataré de explicar mi punto de vista.

He presenciado y fui parte de amores cortos y largos, sanos y enfermos. Transité por muchos caminos y hasta que encontré a quien considere el amor de mi vida. Pude enamorarme como un loco y ser correspondido de la misma manera, hallé a mi cómplice perfecta, este quizás ha sido el regalo más grande: Me casé con quien para mi había sido la mujer más hermosa del mundo, con una persona maravillosa llena de cosas extraordinarias y del amor más cálido y apasionado, una persona divertida, inteligente, aventurera, irónica y sarcástica, trabajadora, soñadora, sensible y cariñosa. Orgullosa y altiva como pocas, pero bondadosa y noble como ninguna. Mi cómplice perfecta y mi maestra en muchos aspectos. Alguien que me hizo sentir completo y grandioso. Sin embargo terminó y no dio para más, pero me enseñó algo tan cercano a lo que deseo, que sólo dejó la esperanza de que eso puede ser real y eterno, habiendo aprendido de los errores que entonces cometimos. 

Pienso por ello, que el amor verdadero puede hallarse,  aunque pueda entrar en un periodo de coma, donde parece mantener un estado de muerte cerebral, pues aunque no haya razones de ninguna especie, inexplicablemente el corazón persiste en el ritmo de su latido. Sé que si puedes querer a alguien por siempre con toda la fuerza de tu corazón por inexplicable que parezca, por deplorable que se escuche este estado para muchas personas cuando la persona ya no está contigo. Creo que ese amor inmenso existe y lo encuentras, lo que entiendo difícil es que ambas partes sepan manejarlo correctamente, que sepan hallar la forma de alimentarlo y hacerlo crecer. Me parece que lo boicoteamos llenándolo de miedos y temores, pero sobre todo, pensando que la meta es solo encontrarlo, hoy entiendo claramente que es algo que se debe seguir trabajando cada día para permanecer.

También creo que ese amor eterno se halla solo una vez, que es el amor de tu vida, algo que te llena el corazón como después nada puede llenarlo.  Algo que hace que el tiempo que dura, haya valido la vida antes y después de conocerlo. Vi este amor en mis padres.

No tienes que compartir mi punto de vista. Es simplemente algo en lo que creo, algo que sigo sintiendo y que por ello, sigo creyendo, por absurdo que parezca. Algo que puedo decir aunque despierte la arrogancia, o tal vez un corazón dormido. Aunque claro, tal vez es pronto para llamarlo eterno, al menos tendría que decir esto mismo el último día de mi vida, pero así lo califico ahora.

Así que bajo esta óptica solo puedo decir, que el amor existe, pero es responsabilidad de nosotros seguir trabajando en hacerlo eterno, todos los días, poniendo atención a los detalles, arrojando de lado el orgullo en pos de la comprensión. No es un juego de poder, sino estado para compartir. Si crees que lo has encontrado, defiéndelo bien: será tu bien más preciado, si piensas que estas con esa persona especial, y las cosas no marchan bien, siempre puede haber forma de resolverlo y hacerlo renacer, pues si lo sabes hallarás la voluntad para rescatarlo poniendo el alma en hacerlo grande. No puedo decirte más, pues no sé más, solo sé que lo que hagas, valdrá la pena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario